Hablar en lenguas viene de los registros bíblicos. En la Era de la Gracia temprana, cuando vino el Espíritu Santo y empezó a llevar a cabo la obra en Pentecostés, conmovió tanto a algunos de los discípulos de Jesús que hablaban en lenguas. Gracias a los registros bíblicos vemos que, cuando los discípulos de Jesús hablaban en lenguas, era en dialectos que las personas de aquella zona podían entender perfectamente y no un mal llamado dialecto que no entendía nadie. Cada zona del mundo tiene dialectos regionales y hay muchísimos idiomas por toda la humanidad. Si no está clasificado como un dialecto de un idioma de la humanidad, entonces no es un dialecto. Ahora vemos que hay muchas personas de todos los grupos y denominaciones que hablan “en lenguas”. La mayoría son “lenguas” que nadie puede entender. Las personas que a menudo hablan en esta clase de “lenguas” no sólo no tienen la verdad, sino que su vida humana incluso se ha vuelto anormal. Por lo tanto, es seguro decir que estas clases de lenguas no forman parte de la obra del Espíritu Santo de ninguna manera porque el Espíritu Santo no hace una obra que no tenga sentido; esto es un hecho aceptado universalmente que nadie puede negar.
Siguiendo cada etapa de la obra de Dios, existen todo tipo de espíritus malos que imitan y falsifican la obra del Espíritu Santo. Satanás engaña a las personas haciendo que ellas “hablen en lenguas”, “vean visiones” y “tengan revelaciones”, etc., a fin de desviar al pueblo escogido de Dios del camino verdadero. Hablar en lenguas, ver visiones y oír voces se clasifica como la obra de los espíritus malos. Esto es indudable. ¿Qué es “hablar en lenguas”? Es hablar un tipo de “idioma” que nadie entiende mientras se ora. Esto es lo así llamado hablar en lenguas. Si alguien habla de una manera que no se clasifica como cualquier idioma, pero la lengua se enreda de una manera que las palabras no son claras, entonces esto es un resultado de la obra de los espíritus malos. “Ver visiones” quiere decir que una persona, con sus ojos abiertos, es capaz de ver algo que las personas normales no pueden ver o algún fenómeno extraño. Este es un tipo de fenómeno de la obra de los espíritus malos. ¿Qué es “oír voces”? Es que algunas personas a menudo pueden oír a los espíritus hablándoles en su interior o una voz hablándoles desde afuera. Este también es un fenómeno de la obra de los espíritus malos. No importa cuántas manifestaciones de la obra de los espíritus malos las personas muestren, todas ellas prueban que hay espíritus malos obrando en ellas. Ciertamente, las personas que han sido poseídas por demonios a menudo tienen espíritus malos obrando en ellas, pero ha habido personas que ocasionalmente han tenido a los espíritus malos obrando en ellas que no están poseídas por demonios necesariamente. Hay varias circunstancias diferentes en las que las personas tienen espíritus malos obrando en ellas. Algunas sienten que algo malo sucede después de haber tenido espíritus malos obrando en ellas y pueden examinarlo con prontitud, reflexionar sobre esto y renunciar a los espíritus malos. Esta clase de personas quizá puedan librarse de la obra de los espíritus malos; otras nunca llegan a darse cuenta de ello y persisten en pensar que tienen al Espíritu Santo obrando en ellas. Eso es muy peligroso. Cuando los espíritus malos han obrado en las personas durante mucho tiempo, es muy fácil que estas sean poseídas. ¿Qué es ser poseído? Ser poseído significa que hay espíritus malos obrando en las personas y que las controlan completamente. Cuando las personas están completamente controladas por Satanás, hasta el punto en que son incapaces de escapar, entonces estas personas están poseídas por espíritus malos. Algunas personas sólo tienen espíritus malos obrando en ellas, pero no han llegado al nivel de estar poseídas, así que no están clasificadas como poseídas por espíritus malos. Cuando las personas tienen espíritus malos obrando en ellas, siempre y cuando no estén poseídas por estos, hay esperanza de que se salven; las personas que están poseídas por espíritus malos no tienen esperanza de salvarse. Todas aquellas que hablan en lenguas, ven visiones y oyen voces son personas en quienes obran espíritus malos, sólo que con distintos niveles de gravedad. Si se trata de un caso en el que hablan en lenguas unas pocas veces, no lo hacen durante varios años y no tienen ningún otro indicio de espíritus malos obrando en ellas, entonces no deben ser tratadas como si tuvieran espíritus malos obrando en ellas. Esta clase de persona habló en lenguas antes porque fue embrujada por la obra de los espíritus malos o porque vivía entre personas en quienes obraban espíritus malos. Siempre que renuncien y eviten a las personas que han estado poseídas o en quienes obran espíritus malos y se esfuercen en buscar la verdad y tomar la senda correcta de creer en Dios, volverán a la normalidad gradualmente. Aquellas personas que han tenido espíritus malos obrando en ellas durante demasiado tiempo no pueden librarse de la obra de los espíritus malos fácilmente. Una vez que han sido poseídas por demonios, son capturadas por Satanás. Así que, no importa quiénes sean, si los espíritus malos han obrado en esa persona durante demasiado tiempo, entonces está en grave peligro y es posible que ya esté poseída. Algunas de ellas pueden contaminarse ocasionalmente por la obra de los espíritus malos porque han sido embrujadas por estos, pero siempre que se den cuenta del hecho con suficiente antelación, pueden renunciar completamente a la obra de los espíritus malos y esforzarse por buscar la verdad, pueden librarse completamente de la obra de los espíritus malos y ser salvadas por Dios. Ellas deben tener esta clase de confianza. Siempre que busquen la verdad, dentro de tres a cinco años pueden estar completamente en la senda correcta y sus circunstancias volverán a la normalidad. Así que las personas que ocasionalmente hayan tenido espíritus malos obrando en ellas, no tienen que preocuparse ni perder la fe. Siempre que busquen la verdad y aprendan a distinguir, pueden librarse completamente de la obra de los espíritus malos y ser salvadas por Dios. Las personas en quienes han obrado los espíritus malos durante mucho tiempo tampoco deben perder la fe y deben esforzarse aún más en buscar la verdad y renunciar completamente a la obra de los espíritus malos y, al hacerlo, tendrán esperanza de ser salvadas por Dios. Cuando yo creí en Jesús en la Era de la Gracia, llegué a tener contacto con algunas personas que a menudo hablaban en lenguas. Sus resultados posteriores todos fueron muy trágicos. Algunas fueron poseídas por demonios, algunas tuvieron problemas de salud mental y la mayoría de ellas al final sufrieron un colapso. Todos aquellos poseídos por demonios no tienen buenos resultados. Esto es absoluto. Por lo tanto, se puede determinar que hablar en lenguas, ver visiones y escuchar voces es completamente la obra de los espíritus malos. Son los espíritus malos imitando y falsificando la obra del Espíritu Santo. Esto se debe ver claramente.
Las personas que creen en Dios deben darse cuenta de que la obra del Espíritu Santo es enteramente significativa y fructífera y de que el Espíritu Santo nunca ha llevado a cabo una obra que no sea significativa. Si el Espíritu Santo obra en alguien durante muchos años, definitivamente, la condición de esta persona mejorará cada vez más, su conocimiento de la verdad se hará cada vez más claro, su conocimiento de Dios aumentará, su conciencia y razón humanas se volverán cada vez más normales y su carácter de vida también cambiará en la misma medida. La obra del Espíritu Santo siempre es fructífera. Este es el caso absolutamente. Sin embargo, aquellas personas que hablan en lenguas, ven visiones y oyen voces durante muchos años no han alcanzado ninguna verdad, no han aumentado su conocimiento de Dios, no pueden verse cambios en su carácter de vida; simplemente hacen que las personas vean su vida humana volviéndose cada vez más anormal y su estado de ánimo cada vez más oscuro. ¿Acaso estas no son consecuencias peligrosas que trae la obra de los espíritus malos? Estas son las consecuencias de la corrupción de la humanidad por parte de Satanás. Los espíritus malos mismos no tienen verdades. Independientemente de cómo obren en las personas, estas no ganarán la verdad, sino que cada vez tendrán menos humanidad y se volverán cada vez más anormales, cada vez más corruptas, hasta que se conviertan en demonios y perezcan. Esas personas tratan la obra de los espíritus malos como la del Espíritu Santo porque los espíritus malos ciegan sus ojos espirituales y, por lo tanto, nunca verán este hecho con claridad. Todos aquellos que hablan en lenguas, ven visiones y oyen voces son todas personas en quienes obran espíritus malos. Si aquellas que tienen espíritus malos obrando en ellas no se dan cuenta de ello con prontitud y siguen siendo capaces de tratar la obra de los espíritus malos como la del Espíritu Santo, entonces ya se han descarriado y han caído en las tinieblas. ¿A qué senda pueden conducir a las personas si son líderes de la iglesia en cualquier nivel? Ya han tomado la senda errónea ellas mismas, considerando al enemigo como pariente y amigo; si son líderes de la iglesia en cualquier nivel, ¿acaso no se trata del ciego guiando a otros ciegos y todos cayendo en el hoyo? Si se desea asegurar de que tomen la senda correcta en su fe, se debe buscar la verdad y conocer la obra del Espíritu Santo. Sólo se puede distinguir todas las clases de obras de los espíritus malos conociendo la obra del Espíritu Santo. Las personas que no conocen la obra del Espíritu Santo pueden ser embrujadas por la obra de los espíritus malos y tomar el cruce equivocado, lo cual daría lugar a su destrucción. Las personas que están embrujadas y que han sido capturadas por la obra de los espíritus malos, son el resultado de haberle prestado atención a lo sobrenatural, a los milagros y a las maravillas.
Cuando los líderes de la iglesia en todos los niveles tratan con personas en quienes obran espíritus malos, deben tener una buena comprensión de los principios, ser justos con las personas y hacer las cosas con precisión. Deben separar a las personas en quienes obran espíritus malos en tres clases: el primer tipo son aquellas que, previamente, fueron contaminadas por la obra de los espíritus malos en ocasiones y después se dieron cuenta de ello relativamente pronto y renunciaron a la obra de los espíritus malos, y que en ellas no han obrado espíritus malos por tres a cinco años. Estas son personas que han sido envenenadas por la obra de los espíritus malos de manera relativamente leve. El segundo tipo son las personas en quienes a menudo obran espíritus malos. Si las personas en quienes a menudo obran espíritus malos aún no se han percatado de ello y aún siguen insistiendo en pensar que es el Espíritu Santo quien obra y se niegan a renunciar por completo a los espíritus malos, entonces ellas corren un grave peligro. Realmente no es fácil para ellas librarse de la obra de los espíritus malos. En cuanto al tercer tipo, si las personas en quienes obran espíritus malos no tienen dominio de sí mismas, los espíritus malos las controlan y ellas obran y embrujan a las personas por todas partes, traen perturbación a la vida de la iglesia y hacen daño al pueblo elegido de Dios y a donde quiera que vayan la gente está en estado aterrorizado y caótico, esto basta para probar que no se trata simplemente de personas en quienes obran espíritus malos, sino que se han convertido en la herramienta de Satanás y están poseídas. Esta clase de personas no pueden ser salvadas y deben ser expulsadas. Se debe tratar de manera diferente a las tres clases de personas mencionadas en quienes obran espíritus malos. El primer tipo son las personas que han sido contaminadas por la obra de los espíritus malos, pero logran percatarse del hecho pronto y librarse de la obra de los espíritus malos. Si este tipo de personas pueden estar seguras de que han pasado varios años desde que tuvieran espíritus malos obrando en ellas, entonces no se las clasifica como personas en quienes obran los espíritus malos. En cuanto a aquellas personas que tienen buen calibre, buena humanidad y que ya han entrado en la senda correcta de creer en Dios, aún pueden ser ascendidas y ser utilizadas, pero sólo pueden ser colaboradores, no líderes. El segundo tipo de personas son aquellas en quienes a menudo obran espíritus malos. Está absolutamente prohibido que sean ascendidas para su utilización. Sólo les está permitido vivir una vida de iglesia. Esto ha sido estipulado por la familia de Dios. Las personas que ya han sido ascendidas para su utilización deben ser reemplazadas. El tercer tipo son aquellas en quienes a menudo obran espíritus malos y que son capaces de embrujar a la gente en todas partes. Se trata de personas que están poseídas. Es correcto expulsarlas lo más rápido posible. Si la obra de los espíritus malos es grave en alguien y perturba a la gente dondequiera que vaya, haciendo que la gente se sienta temerosa e incómoda, esta persona se clasifica como poseída y debe ser expulsada. Al tratar con personas en quienes obran espíritus malos, debemos distinguir entre aquellas que a menudo tienen la obra de los espíritus malos y aquellas que, en el pasado, en ocasiones tuvieron la obra de los espíritus malos. Si a menudo hay espíritus malos obrando o no debe basarse principalmente en su comportamiento durante los pasados uno o dos años. Si las personas han tenido espíritus malos obrando en ellas ocasionalmente en el pasado, pero no durante los últimos tres a cinco años, entonces hay esperanza para esta clase de personas si alcanzan la verdad y no tiene por qué haber ningún peligro. Si no ha habido obra de los espíritus malos durante tres a cinco, o de siete a ocho años y estas personas han progresado especialmente en su búsqueda de la verdad, pueden ayudar a las personas y guiarlas para entrar en la realidad de la palabra de Dios y pueden utilizar la verdad para resolver problemas, entonces la iglesia aún puede ascenderlas para su utilización como de costumbre. Dios no trata injustamente a las personas y la familia de Dios es justa con las personas.
18 de agosto de 2006
Fuente: Iglesia de Dios Todopoderoso
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