Los mandamientos y leyes que Jehová Dios promulgó para los israelitas no sólo han tenido un profundo impacto en la ley humana, sino que también han representado un papel crucial en el establecimiento y la formación de la civilización moral y las instituciones democráticas en las sociedades humanas.
Como miembros de la raza humana y cristianos devotos, es responsabilidad y obligación de todos nosotros ofrecer nuestra mente y nuestro cuerpo para el cumplimiento de la comisión de Dios, porque todo nuestro ser vino de Él y existe gracias a Su soberanía...