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¿Cómo conocer a Cristo encarnada?

 

Reflexión cristiana | ¿Cómo conocer a Cristo encarnada?

 

En la Biblia se dice: “Porque un niño nos ha nacido, un hijo nos ha sido dado, y la soberanía reposará sobre sus hombros; y se llamará su nombre Admirable Consejero, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz” (Isaías 9:6). Este versículo nos recuerda: En ese entonces, el Señor Jesús nació en un pesebre y crecía en una familia común, y tenía una apariencia ordinaria y normal. Él no nació en el palacio ni tenía una gran imagen ni era muy alto como la gente imaginó, tampoco guió a sus súbditos a resistir a la agresión extranjera como David, por el contrario siempre toleraba y perdonaba los pecados del hombre. Los fariseos usaban sus propias opiniones para negar, resistir y condenar al Señor Jesús, al final, se aliaron con el gobierno romano para clavarlo en la cruz, cometieron un crimen atroz y fueron castigados por Dios. ¿Qué advertencias nos ha dado la experiencia fracasada de los fariseos? ¿Cómo debemos conocer a Dios encarnado?

 

En un libro se dice: “Investigar algo así no es difícil, pero requiere que cada uno de nosotros conozca esta verdad: Aquel que es la encarnación de Dios tendrá Su esencia, y aquel que es la encarnación de Dios tendrá Su expresión. Haciéndose carne, Dios traerá la obra que debe hacer, y haciéndose carne expresará lo que Él es; será, asimismo, capaz de traer la verdad al hombre, de concederle la vida, y de mostrarle el camino. La carne que no contiene la esencia de Dios seguramente no es el Dios encarnado; de esto no hay duda. Para investigar si es la carne encarnada de Dios, el hombre debe determinarlo a partir del carácter que Él expresa y de las palabras que Él habla. Es decir, si es o no la carne encarnada de Dios, y si es o no el camino verdadero, debe discernirse a partir de Su esencia. Y así, para determinar[a] si es o no la carne de Dios encarnado, la clave está en prestar atención a Su esencia (Su obra, Sus palabras, Su carácter, y mucho más), en lugar de fijarse en Su apariencia exterior. Si el hombre sólo ve Su apariencia exterior, y pasa por alto Su esencia, demostrará la ignorancia y la ingenuidad del hombre. La apariencia externa no determina la esencia; aún más, la obra de Dios nunca se ha conformado a los conceptos del hombre. ¿No estaba reñida la apariencia exterior de Jesús con los conceptos humanos? ¿No eran Su aspecto y Sus vestiduras incapaces de proporcionar pista alguna sobre Su verdadera identidad? ¿No fue la razón por la que los antiguos fariseos se opusieron a Jesús, porque simplemente miraban Su aspecto exterior, y no se tomaron en serio las palabras que Él habló?

 

Si quiere conocer más, por favor lea: ¿Que es la encarnacion?

 

 

Las escrituras tomadas de LA BIBLIA DE LAS AMERICAS® (LBLA) Copyright © 1986, 1995, 1997 por The Lockman Foundation usado con permiso. www.LBLA.com.

 

 

 

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